13 mar Acné: estos malos hábitos lo potencian sin que te des cuenta

Acné: estos malos hábitos lo potencian sin que te des cuenta

Publicado el : 13/03/2018 17:39:48
Categorías : Belleza , Blog Home

A todas nos ha sucedido: el día previo a una entrevista de trabajo, a una celebración o a una cita importante... surge el acné. ¡Horror! Y si además tienes una piel proclive a estas erupciones bacterianas que son el acné, entonces la desesperación es mayor.

Ante estas situaciones, se corre el riesgo de aplicar soluciones aparentemente mágicas que lo único que consiguen es maltratar la piel y no eliminar el problema de raíz. Por ello, vamos a recopilar los malos hábitos en los que se suele incurrir para combatir el acné que lo único que consiguen es potenciarlo.

#1 Uso de productos anti-acné inadecuados

En el mercado se venden soluciones mágicas para acabar con el acné. Sin embargo, muchas de estas soluciones secan la piel, generando nuevas irritaciones, sobre todo cuando se aplican sobre el resto de áreas y no directamente

El gel antiacné para pieles mixtas o grasas actúa directamente sobre la secreción sebácea, responsable de la aparición del acné. Este gel se debe aplicar únicamente en la zona afectada y siempre de noche.

No obstante, cuando tu piel tiene una alta concentración de grasa o acnéicas nuestros expertos recomiendan aplicar un tratamiento completo en cabina y complementarlo con otros productos postQuam tales como leches limpiadores y tónicos astingentes o cremas hidratantes específicas.

#2 No eliminar el maquillaje antes de dormir

Da igual cuántas veces lo repitamos. Nunca son demasiadas. Sabemos que cuesta hacerlo, pero las consecuencias de no desmaquillarse son aún más graves: dejas agentes externos potencialmente peligrosos para la aparición de acné y la sequedad de la piel.

Básico: lavar la cara con un limpiador específico, que no tenga sulfatos.

#3 Reventar el acné

Resulta adictivo. Ver un grano o una cabeza prometedora y pensar: "no, no me fastidiarás el día". Te lanzas sobre el espejo para acabar con él, pero lo que no sabes es que si no está en el momento adecuado estás luchando contra tu propio sistema de protección. Y no podrá sumirse de forma natural